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Tener el Capítulo General de nuestra familia dominicana en Asia es, de hecho, una gran bendición para nosotros, especialmente para nuestros hermanos y hermanas vietnamitas, sí que el capítulo se celebra aquí en Vietnam. Aunque no participamos directamente en ninguna preparación, fuimos testigos de cómo nuestros hermanos y hermanas dominicanos se han estado preparando para este evento muy significativo. La información nos fue constantemente enviada, el Padre Joseph Ngo Sy Dinh, OP, el Secretario General del Capítulo General, siempre nos actualiza cada vez que celebra Misa en nuestra comunidad.

Nos unimos a nuestra familia dominicana en oración por el éxito del Capítulo mientras estábamos ansiosas por el Día de la Familia Dominicana el 21 de julio cuando recibimos una invitación inesperada del Padre Joseph. Fue una invitación para que nos uniéramos en dar la bienvenida al nuevo Maestro General. El 13 de julio a las 9 en punto de la mañana, la Hna. Thach y yo nos unimos a los capitulares y algunas hermanas religiosas de diferentes Congregaciones en la Misa del Espíritu Santo presidida por el Padre Timothy Radcliffe. Después de la Sagrada Eucaristía, los capitulares procedieron a votar mientras nosotras, las hermanas, permanecimos en la capilla rezando por las elecciones y por el Maestro general entrante.

Mientras esperábamos el resultado, aprovechamos la oportunidad para compartir sobre nuestra vida dominicana aquí en Vietnam, lo cual fue muy oportuno para mí saber cómo nuestras hermanas vietnamitas dominicanas están viviendo y cumpliendo su misión, especialmente que la mayoría de ellas son las Prioras Generales de las Congregaciones locales. Después los susurros vinieron y siguieron viniendo felicitándonos filipinos por el nuevo Maestro General. Nos emocionamos mientras esperábamos el anuncio oficial de quién es realmente el nuevo Maestro de la Orden. Luego tuvimos la procesión yendo a la Iglesia. He aquí que, al final de la línea, estaba el Rev. P. Gerald Francisco Timoner, III, el primer Maestro Asiático de la Orden Dominicana, ¡Un Filipino!

Es una alegría y un gran privilegio ser una de los primeros en felicitar y dar la bienvenida al nuevo Maestro de la Orden. Sin embargo, ¿es aún un mayor privilegio dar la bienvenida al nuevo Maestro General que es mi co-filipino, a quien conozco e incluso tuve la oportunidad de trabajar como grupo en la reunión de Justicia y Paz celebrada en Indonesia mientras era Provincial de la Provincia de Filipinas! ¡A quien llamamos el Filipino San Alberto Magno!

En su primer discurso, el P. Gerald nos recordó que somos predicadores, que la misión no es lo que hacemos sino lo que somos. Somos predicadores incluso cuando no estamos predicando. Somos predicadores incluso cuando ya no podíamos hablar. Somos predicadores incluso cuando no estamos ordenadas. Somos predicadores porque esa es nuestra identidad. Luego nos retó a mirarnos a nosotros mismos en lo que realmente es nuestra identidad como predicadores del Evangelio.

El 21 de julio, tuvimos el Día de la Familia Dominicana con el tema Un Mundo, Una Familia, Una Misión que realmente habla de nosotros ese día. Fue una reunión de hermanos y hermanas dominicanos provenientes de diferentes partes del mundo, que vivieron diferentes ámbitos de la vida (ya que nuestros jóvenes y laicos dominicanos también estuvieron presentes) pero que vivieron la misma espiritualidad, formando una familia dominicana y compartiendo una misión en un mundo para el cual somos enviados a predicar.

Agradecemos sinceramente a Dios por este privilegio tan grande que nos permite participar en el Capítulo General de nuestra familia dominicana. Agradecemos a nuestros Hermanos Dominicos en Vietnam por darnos esta oportunidad. Agradecemos a nuestros Hermanos Dominicos de la Provincia del Santo Rosario por visitarnos en nuestro humilde hogar a pesar de su agitado horario dirigida por el Prior Provincial, P. Bonifacio Solís, OP y por la visita sorpresa de nuestros Padres Dominicos de la Provincia de Filipinas dirigida por el Prior Provincial, P. Padre Napoleón Sipalay, OP.

El Capítulo general ya está terminando. Nuestra misión continúa. Oremos por el P. Gerald, recemos con él y colaboremos con él para que juntos, como una Familia que comparte una misión en un mundo, podamos vivir nuestra identidad en plenitud: ¡Predicadores de la BUENA NOTICIA!

Hna. Joyce Q. Frianeza, OP

Comunidad Nuestra Señora del Rosario

Ho Chi Minh, Vietnam