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UNA PEQUEÑA EXPERIENCIA PASTORAL

26 septiembre, 2017

Este año, en el encuentro de Hermanas Delegadas de Pastoral de las comunidades, que tuvimos en Vic con la Hna. Ana María Penadés, Delegada general de Pastoral, en el mes de enero, salió el tema de invitar a algún curso de la escuela a compartir con la comunidad nuestra experiencia de vida comunitaria. Aunque, en nuestro caso de Girona – Pont Major, los alumnos sólo están hasta primaria, acordamos hacerla con los de 4º curso. Fue una bonita experiencia. Les acompañaron el Jefe de estudios y la tutora.

Como venían del patio y estaban acalorados, les dimos un vaso de agua fresca, a la vez que visitábamos el comedor y la cocina. A continuación pasamos a nuestro piso, todo en la misma planta. Vieron el oratorio, pequeño y acogedor. También algunas habitaciones, cuartos de baño, lavadero…, y salieron a la terraza, que les encantó. Todo eran sorpresas: esto es un piso!! qué bonito!! Después pasamos a la sala de comunidad.

En la sala nos sentamos, algunos en el suelo, y allí comenzó el diálogo. Fuimos explicando, que el Padre Coll, que todos conocen, fundó la Congregación, entre otras motivaciones, porqué veía que las niñas no iban a la escuela y se preocupaba mucho por su formación.

Hicimos una descripción del horario que tenemos: por la mañana hacemos oración, vamos a desayunar y luego cada Hermana a la escuela al lugar que tiene asignado y donde es necesaria nuestra presencia, como por ejemplo: refuerzo, comedor, portería, ayuda a la administración… y se atienden las necesidades que se van presentando. Estas actividades se hacen, en estos momentos, como voluntariado. Por la tarde tenemos otra vez oración, la Eucaristía, y antes de ir a dormir la oración de la noche.

Surgieron varias preguntas con las que se pudo explicar las motivaciones para entrar en la Congregación. ¡Qué sentido tiene nuestra consagración de entrega y de atención a los demás! Los votos que hacemos se explicaron cada uno con ejemplos prácticos… Incluso la tutora preguntó qué hacíamos los fines de semana sin escuela. Nuestra respuesta fue: entre otras cosas, reforzar la convivencia, la oración, la lectura…

Al hacer la valoración, en reunión comunitaria, se acordó que lo haríamos cada año con un curso diferente. Esperamos que se pueda repetir. Animamos a que lo puedan llevar a cabo en otras comunidades, si es que no lo hacen.

H. Teresa Soldevila

UNA PEQUEÑA EXPERIENCIA PASTORAL