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«Los retos de la Dominica de la Anunciata como mujer predicadora,en clave DO-MI-NI-CA-NA».

«Anda y dile a mis hermanos…»

El Resucitado nos convierte en: Mujeres predicadoras.

Desde todos los puntos de la Provincia vamos llegando con la ilusión de todos los encuentros navideños, con los mismos interrogantes y las mismas ganas de poner lo mejor de nosotras mismas para que sean de verdad: días de oración, de escucha, de interiorización, de fraternidad, conversión.

Después de la acogida, siempre cálida de la Priora provincial, H. María José, de las hermanas del Consejo, y con nuestra carpeta a punto, comenzamos a leer los objetivos propuestos.

– Profundizar en la espiritualidad de la encarnación desde nuestro ser de mujeres predicadoras.

– Buscar juntas los caminos que den respuesta a los desafíos que la misión evangelizadora de la Iglesia nos presenta hoy.

– Colaborar en el proceso de dinamización comunitaria desde el impulso de la vida litúrgica y de oración, elemento de renovación personal y comunitaria.

– Hacer crecer en cada una de nosotras el sentido de pertenencia a la Provincia a través del aporte personal y la convivencia fraterna.

H. María José, con la profundidad que la caracteriza, en sus palabras iniciales nos ayudó a pensar en lo que sería el centro de nuestro encuentro estos días.

EVANGELIZACIÓN-LITURGIA-MUJERES PREDICADORAS.

A ello nos ayudarán dos personas muy conocidas y queridas: Padre Felicísimo y Hna. Ángeles Figuls.

Algunos puntos que en tono meditativo Felicísimo va subrayando:

– La experiencia de la fe como fuente del sentido de nuestra vida.- La predicación asociada a la experiencia evangélica.- Ámbito de la Comunidad. La convivencia como núcleo de satisfacción. – La Misión. Anuncio del Evangelio desde nuestro ser de mujeres predicadoras. Hemos profesado en una Familia Dominicana que santo Domingo y san Francisco la soñaron como «lugar» de predicación.

Sobre estos núcleos va desarrollando el tema con ese don que posee y sabe transmitir desde su experiencia de Dios y maravillosa cercanía. En las Eucaristías diarias nos ayuda a profundizar desde la oración y los silencios.

El día 29 le tocó el turno a H. Ángeles Figuls. La conocemos y no precisa presentación. Aunque sí decir algo de sus características: armonía, sencillez, liturgia…

Ella, magníficamente, nos fue completando, cómo la liturgia hecha vida, va encendiendo luces, que en la relación con Jesús en la Eucaristía nos hacemos luz para nuestros hermanos los hombres.

Sus cálidas palabras y el fruto de su profundización y lecturas nos abren a ir descubriendo cómo orar con los salmos, para ello:

•Dejarnos impulsar por el Espíritu.•Comunión con la Palabra.•Profundizar en textos bíblicos y litúrgicos •Fortalecer el sentido de la oración.•Que la liturgia nos lleve a la fuente de la fe y a la evangelización. •Descubrir cómo Santo Domingo y el Padre Coll son testimonio para nosotras. Iban por los caminos rezando, cantando.

Durante todo el Encuentro nos acompañó H. Asunción Mitjans en nombre de la Priora general. Con mucha claridad y usando los métodos modernos audiovisuales, presentó el Estudio Congregacional para este sexenio, a partir de las Actas del Capítulo General de 2012 para hacer vida el lema:

UNA ANUNCIATA RENACIDA PARA UNA NUEVA EVANGELIZACIÓN.

Tuvimos ocasión para compartir a nivel de pequeños grupos, en el comedor, en diálogo con el Consejo.

Ya el último día tuvimos un momento de asamblea con H. María José y las Hnas. del Consejo en la que se trataron algunos asuntos importantes como la información detallada de la unificación de las dos provincias de Cataluña. En un interesante diálogo, a partir del momento actual que vivimos en España y la necesidad de irnos preparando para la unificación en un futuro de las Provincias de santo Domingo y santa Catalina surgieron ideas de cómo podemos ir realizando esa preparación. Todas coincidimos en que lo primero y más urgente es un proceso de mentalización a nivel de las comunidades y mucho diálogo, comprensión y sobre todo oración.