NOTICIAS

COMENTARIO AL EVANGELIO DEL DOMINGO XXVII DEL TIEMPO ORDINARIO CICLO C

27 septiembre, 2022

El Evangelio de este domingo 27 del tiempo ordinario habla de Fe y Humildad. Mientras reflexionaba sobre la lectura del Evangelio de San Lucas 17,5-10, me preguntaba qué me había pasado en estos dos meses de mi viaje.

Desde el momento en que recibí la noticia de que iré a España para estudiar, hasta el proceso de obtención de mis documentos y Visa… fue un poco difícil ya que no pude reservar mi cita en línea en la embajada de España… Se está acercando el día de mi partida, pero aún no tenía mi cita para presentar los documentos necesarios en el Consulado. Estaba suplicando al Señor ayuda a través de la intercesión de Santo Domingo, del P. Coll y de nuestras Hermanas Beatas Mártires. Mis hermanas de la Comunidad y  de la Provincia están orando por mí. Incluso fui al Consulado el 25 de agosto de 2022 para pedir consideración, pero no hay ninguna. Me aconsejaron que me ocupara de la cita en línea por si hay alguna cancelación por parte de otro solicitante, para así poder obtenerla. Estaba tan nerviosa y preocupada por no poder tener mi Visa a tiempo para la salida. Pero gracias  a las oraciones, el mismo día, antes de regresar a casa, pasé por mi comunidad de San Carlos Pangasinan, antes de salir revisé nuevamente la reserva on line y obtuve una cita para el día 26 de agosto de 2022. Al final pude presentar mis documentos.

En el Evangelio de hoy, los apóstoles le dijeron a Jesús que “aumente nuestra fe”. Pero Jesús no respondió directamente a su petición. En cambio, les dice: “Si tuvieras una fe del tamaño de un grano de mostaza, podrías decirle a este sicómoro: “Sé desarraigado y trasplántate al mar, y te obedecerá”. Con estas palabras de Jesús recordamos nuestra fe, ¿Cómo es nuestra fe en Dios? ¿Cuántas veces nosotros pedimos a Dios que aumente nuestra fe?.

En este primer domingo del mes del Santo Rosario en el que se nos insta a profundizar en nuestra fe y  a orar,  por intercesión de nuestra Madre Amada, por el aumento de nuestra fe en Su Hijo. La fe no es confianza en uno mismo, es confianza en Dios. Requiere humildad, humillarnos ante Dios para reconocer su gran misericordia y amor.

Con lo que estaba pasando entendí que, cuando creemos en algo, cuando tenemos fe y confianza total en la providencia de Dios, muchas veces pasamos por lo imposible para llegar a lo posible.

Dejad que la luz de la Fe, dejad que la luz del Evangelio ilumine nuestro camino, con plena confianza en el poder de Dios en nuestra vida. Recemos juntos la oración de los Apóstoles “Señor, auméntanos la fe”

H. Luong Thi Minh Phu, OP

Provincia «San Raimundo de Peñafort»