NOTICIAS

Veamos que nos proponen las lecturas de la liturgia del IV DOMIGO DE ADVIENTO.
En la primera lectura, observamos la constante relación que Dios tiene con su pueblo, mediante sus elegidos y enviados.
Le dice a David, a través de Natán: “estableceré después de ti a una descendencia tuya, nacida de tus entrañas y  consolidaré tu reino (2 Samuel 7,13).

El Salmo 88, manifiesta la proposición y fidelidad de Dios con su pueblo y la respuesta del mismo: “cantaré eternamente la lealtad del Señor, anunciaré tu fidelidad por todas las edades”.

El Evangelio (Lc 1,26-38) nos presenta el anuncio del ángel Gabriel, que destaca en este relato como mensajero. Se presenta ente María, prometida de José, y que tiene como proyecto de vida el matrimonio. Sin embargo, Dios tiene para ella otros planes.
Esta joven, conoce las Escrituras y las guarda en su corazón. Como mujer que irradia sencillez, modestia, servicialidad y que reconoce ser pequeña ante Dios, es consciente que de su respuesta depende la realización del proyecto del Señor.
El ángel le dice: “alégrate” pues la alegría es el sentimiento adecuado para quien va a ser madre del Redentor. Dios antes de decirle lo que quiere de ella, le anuncia que “está llena de gracia, el Señor está contigo”. Dios que piensa encarnarse entre los hombres, está con la Virgen, se inicia pues la historia del proyecto que tiene para ella, asegurándole su asistencia antes de encomendarle la tarea.
María “se turba” al entender que algo se le va a pedir, pero el ángel la tranquiliza y le anuncia con claridad lo que su Señor le propone: “vas a concebir, darás a luz un hijo y le pondrás por nombre Jesús, será grande…”No es que María dude lo que iba a ser el hijo anunciado, es que no entiende cómo podrá ser permaneciendo virgen, por lo que el ángel le explica: “el Espíritu Santo bajará sobre ti” y aunque no pide ninguna prueba ,el ángel se la brinda: “ahí tienes a tu pariente Isabel que, a pesar de su vejez, ha concebido un hijo y la que decían que era estéril, está ya de seis meses”.

María, modelo de FE, es el único personaje bíblico que acepta la petición con la fórmula:” he aquí la sierva”, pasa a estar al servicio de Dios que en ella se hace Hombre y acepta sin condiciones el proyecto divino.

Que María se apresure a visitarnos, como hizo con su prima Isabel, para que acompañe nuestro caminar llevando por el mundo la luz de Cristo, cuya antorcha nos entregó nuestro Fundador, San Francisco Coll, siendo fieles, como ella lo fue, al proyecto que Dios tiene para cada una de nosotras.

Hna. Olga Díaz

Provincia «Rosa Santaeugenia»