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Una visión general de «CRISTUS VIVIT»

3 abril, 2020

CHRISTUS VIVIT

El 2 de abril de 2019, se publicó la exhortación apostólica del Papa Francisco, Christus Vivit (¡Cristo está vivo!). La exhortación se dirige tanto a los jóvenes como a todo el pueblo de Dios, y se basa en gran medida en las reflexiones y conversaciones que tuvieron lugar en el marco del Sínodo de los jóvenes.

 A lo largo de la exhortación apostólica, el Papa Francisco tiene mucho cuidado de evitar la tentación de caer en el error cuando habla de la importancia de la juventud en la Iglesia. Quiere distinguir la alegría de la juventud de un falso culto a la juventud, una noción que a menudo se utiliza para manipular a los jóvenes.

Por ejemplo, sostiene que, para ser verdaderamente sabio, un joven debe estar abierto al futuro y ser capaz de aprender de los que tienen más experiencia. Insta a la Iglesia a liberarse de las cosas que la atrapan en el pasado y la hacen envejecer. Sin embargo, advierte a la Iglesia que no “piense que es joven porque acepta todo lo que el mundo le ofrece… deja su mensaje a un lado y actúa como todos los demás”.  Más adelante en la exhortación, el Papa Francisco advierte del error de confundir la belleza con las apariencias, de una espiritualidad sin Dios y de la reducción de los jóvenes a una homogeneidad que se niega a reconocer las identidades culturales individuales.

El Papa Francisco ofrece una visión de la juventud informada por una verdad básica: “ser joven no es sólo perseguir placeres fugaces y logros superficiales”. Además, enseña que el propósito de la juventud es aprender de “un compromiso generoso, una dedicación de todo corazón y sacrificios que son difíciles pero a la larga fructíferos”.

El Papa Francisco entiende que la juventud es más que un período de tiempo. La juventud, afirma, es un estado de ánimo. Es por eso que una antigua institución como la Iglesia puede renovar su juventud. Él elabora sobre lo que esto parece, estableciendo a María como el “gran modelo para una Iglesia joven”.

 En Christus Vivit, el Papa Francisco reconoce tres áreas de particular importancia que el sínodo examinó: el entorno digital, la migración y el abuso. Su propósito no es ofrecer nuevas conclusiones, sino pedir un mayor análisis y desarrollo de respuestas a estas realidades.

Él ofrece un mensaje específico para todos los jóvenes, un mensaje que contiene las tres verdades: ¡Dios te ama!, ¡Cristo se sacrificó para salvarte! y ¡Cristo está vivo! El Papa Francisco cree que la profunda apreciación de este mensaje puede conducir a un encuentro con Cristo que sea capaz de sostenerlo durante toda su vida cristiana.

El Papa sugiere que vivir los años de nuestra juventud a la luz transformadora del Evangelio significa reconocer a la juventud como un tiempo de sueños y decisiones; de vivir en el momento presente y aprovechar al máximo las oportunidades que ofrece la vida; de encontrar al amigo que es Jesús; de madurar física, intelectual y espiritualmente; de crecer en el amor generoso y misericordioso; de comprometerse a servir y transformar la gran comunidad; y de ser testigo del Evangelio dondequiera que uno se encuentre. Al mismo tiempo, tiene claro que la juventud no es un “tiempo intermedio”. Más bien, los jóvenes son el “ahora de Dios”. Luego cierra la exhortación con capítulos sobre la pastoral juvenil, las vocaciones y el discernimiento.

En los próximos artículos de Pastoral Juvenil Vocacional reflexionaremos sobre el mensaje de cada capítulo de CHISTUS VIVIT con la esperanza de que al hacerlo nos animemos a redescubrir la alegría de caminar y acompañar a los jóvenes en su proceso de encontrar la voluntad de Dios, la vocación a la que están llamados a responder en la fe y el amor.

Delegación General de PJV