UN FIN QUE ES COMIENZO
Cuando el día 4 llegábamos a Vic para iniciar los días de espiritualidad que precedían al I Capítulo Provincial Electivo de la recién estrenada Provincia Rosa Santaeugenia, sabíamos que sería una experiencia única, como lo es cada Capítulo, y que el significado de éste y el camino que habríamos de recorrer sería nuevo, especial, diferente, lleno de posibilidades.
Así nos lo decía la P. General, H. Ana Belén Verísimo en la carta de clausura del Capítulo el día 22 de enero de 2020.
Habíamos vivido días de fraternidad, de trabajo, de búsqueda de la voluntad de Dios, de deseos de ser realistas y a la vez soñadoras. Estábamos abiertas a las distintas mediaciones de Dios a través de las hermanas. Elaborábamos las Actas con perspectiva de futuro, sintiéndonos en comunión con las 42 comunidades y las 324 hermanas.
La oración simbólica de final del capítulo, recorría tres momentos de la vida de Rosa Santaeugenia como tierra escogida, como tierra fecunda y como tierra bendecida. Al igual que ella, todas nosotras somos tierra sagrada que Dios ha elegido para dar fruto. Emprendemos un nuevo camino y lo recorremos junto a nuestra protectora, para dar continuidad al carisma del P. Coll, que continúa vivo.
Llegando al final podíamos decir aquello de “misión cumplida”. Ante nosotras la tarea de ser alegre testimonio de fidelidad y de entrega. De vuelta a nuestras comunidades para anunciar la Buena Noticia que se ha gestado y alumbrado en estos días.
En la despedida, una palabra de agradecimiento a la Casa madre de Vic. La obra del P. Coll sigue extendiéndose. La semilla de la Anunciata continúa siendo fecunda gracias a nuestro compromiso de regarla con la oración, la vida comunitaria, el estudio y la misión.
Un fin que es comienzo. Una nueva provincia, una nueva etapa en nuestro caminar congregacional. ¡Que la hna. Rosa Santaeugenia bendiga a cada hermana y haga crecer la VIDA expresada en las Actas!.
¡GRACIAS P. COLL!
Hna. Loli Virgel
