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Residencia universitaria Valencia. Final del viaje

31 mayo, 2017

Hemos llegado a nuestro destino con nuestra maleta cargada de buenos deseos para regalar durante este verano y lo celebramos junto a San Francisco Coll  fundador de la Anunciata. El 19 de Mayo es un  día grande y alegre para nosotras, estamos de fiesta y damos gracias a Dios por su vida y por el curso que termina.

Nuestra celebración comenzó con el discurso de nuestra directora:

Querida familia,

Hoy es un día de celebración para todas las que formamos parte de las Dominicas de la Anunciata. Es el día de nuestro fundador, San Francisco Coll, quien nos ha estado acompañando en cada uno de los pasos que hemos ido dando hasta formar esta gran familia.

Cada una de vosotras, entró a formar parte la Anunciata, en el momento en el que aparecisteis por la puerta con vuestras maletas. ¿Os acordáis de ese día?, un día que dejabais atrás una etapa y empezabais con mucha ilusión una nueva distanciada de vuestros seres queridos.

Aquí os acogimos, y quisimos contagiaros y daros a conocer nuestros valores con el fin de que, el día que nos dejéis, podáis ser personas no solo formadas académicamente sino personas que realmente aporten a la sociedad y contagien a los de su alrededor los valores dominicanos y cristianos aquí aprendidos.

A principio de curso, os pedía que dejarais huella, así como vuestra esencia. En resumen, lo mejor de vosotras, y que pudiéramos, en el día a día, forjar esta gran familia que hoy se une, una vez más, para celebrar que estamos juntas. Como en todas las familias, ha habido alegrías y disgustos, enfados y risas, pero no olvidéis que estamos conviviendo y tenemos que saber escuchar, aceptar, comprender, ser tolerantes, empáticos, y sobretodo saber perdonar; solo así podremos disfrutar de nuestra familia en la que cada una de vosotras sois parte importante.

Muchas de vosotras, termináis una etapa en La Anunciata, y continuáis en vuestra etapa de estudiante por vuestra cuenta, os deseamos de todo corazón, que os vaya bien, y que no olvidéis lo aquí aprendido. Que tendréis también momentos buenos y malos, y que debéis seguir adelante manteniendo la ilusión, el esfuerzo, la constancia, la empatía, la paciencia, la palabra, así como el cariño y respeto claves para la convivencia. Esperamos que el tiempo que hayáis estado con nosotras os ayude a seguir en este largo camino de la vida defendiendo los valores aquí aprendidos. Recordar que esta es vuestra casa y seréis bienvenidas siempre.

A las que os quedáis, pediros que sigáis  colaborando con nosotras, las Dominicas de la Anunciata, a seguir trabajando en los valores humanos y cristianos que queremos transmitir, a que no decaigáis en la rutina del día a día, sin pensar que he podido hacer hoy para mejorar mi mañana,  nosotras solo os acompañamos para que podáis sacar vuestro mejor yo.

Ya solo me queda daros las gracias a todas, por este curso que hemos vivido y por ayudarnos a seguir creciendo en nuestra misión.

Os deseo lo mejor para este mes de junio lleno de exámenes, y pido al Padre Coll os ilumine y no caigáis en la desmotivación.

Feliz Verano a todas!!!!!!!!

Proyectamos un Power Point sobre la vida del Padre Coll que nos invita a ser luz del mundo,  testimonio del optimismo cristiano,  enamoradas de la vida,  personas felices sirviendo a los demás y sembradoras de alegría a nuestro alrededor.

En el Evangelio leímos las bienaventuranzas, todo un programa de vida y felicidad,donde vimos que el Padre Coll  las vivió hasta las últimas consecuencias.

No nos olvidamos en esta oración de pedir por las personas que sufren, por los misioneros, la Congregación, los jóvenes, las familias,  las residentes que salen y las nuevas que comenzarán….

Momento bonito el que vivimos en el Ofertorio donde unas niñas danzando nos invitaron a reflexionar y a profundizar el canto “Dios está aquí”, en el ambiente se  respiraba esta realidad, Dios estaba en el salón con nosotras.

Siguieron las ofrendas:Corazón, símbolo del amor y la alegría que queremos compartir.

Palabra de Dios, fuente donde el P. Coll sacaba fuerzas para la misión.

La lámpara encendida donde escuchamos “Un fuego produce otro fuego, una luz otra luz”.

En el padrenuestro nos cogimos de la mano,  guardamos un minuto de silencio en solidaridad con tantas personas que están faltos de paz y  viven en ambientes hostiles.

En este día no podía faltar la acción de gracias pues son muchas cosas por las cuales debemos agradecer  a Dios tanta riqueza.

Gracias:

Por el testimonio de valores que nos ofrece el Padre Coll,  por las personas que encontramos en nuestro camino, por María a la que queremos tener siempre por modelo, por el curso que termina, por las nuevas amistades adquiridas y por los buenos momentos, por las nuevas experiencias.

Graciastambién a la comunidad de la Anunciata y a todas las personas de la residencia que nos han acompañado y han trabajado para que nuestra vida aquí haya sido un hogar con una  verdadera familia donde hemos crecido en valores humanaos y cristianos.

Finalizamos el acto  con la oración del envío,  imposición de bandas  y  entrega de las mochilas cargadas de valores, obsequio por parte de la residencia. Nos deseamos felices vacaciones y nos animamos con esta consigna: “Donde haya una residente de la Anunciata que reine la Paz y la Alegría”.

Concluimos cantando el Himno al Padre Coll y una exhibición por parte de la tuna que nos acompañó hasta la madrugada, disfrutando de una suculenta cena, baile y photocall.

Firmado: Residencia Anunciata