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LOS VOLUNTARIOS SE PREPARAN

3 abril, 2014

II ENCUENTRO ANUAL DEL VOLUNTARIADO “ANUNCIATA” 2014:

LOS VOLUNTARIOS SE PREPARAN…

 

“SER VOLUNTARIO, SER VOLUNTARIA, constituye una oportunidad única para descubrirse a sí mismo, acercarse al que sufre,  vivir la solidaridad, irradiar esperanza y transformar la sociedad. En esta elección de vida, el voluntario no tarda en descubrir que, en realidad, no interpreta el papel del que da, sino del que recibe; que no es el maestro, sino el discípulo; que no es él quien transforma a los otros, sino los otros los que le transforman a él”

Desde esta perspectiva es fundamental tomarse el tiempo para reflexionar, con el fin de prepararse al encuentro con las personas con quienes se comparte la experiencia, las actividades y sobre todo la vida.

En el último encuentro del voluntariado en el mes de noviembre 2013, los voluntarios propusieron Barcelona como próximo lugar de encuentro, sin saber que días mas tarde, en un acto celebrado en el Parlamento Europeo de Bruselas, coincidiendo con el Día Internacional del Voluntariado,  es decir el 5 de diciembre, Barcelona seria elegida como Capital Europea del Voluntariado 2014.

Efectivamente el voluntariado Anunciata se hizo presente en Barcelona tal como estaba previsto  e igualmente hubo otro encuentro en Madrid para los que no pudieron asistir a Barcelona.

ALGUNOS VOLUNTARIOS NOS COMPARTEN:

El 1 de marzo se celebró en Barcelona el Encuentro del Voluntariado Anunciata, con la participación de más de 20 personas interesadas en conocer y participar como voluntarios en las misiones de la Congregación Dominicas de la Anunciata.  Este Encuentro fue especial ya que precisamente Barcelona  ha sido elegida como Capital Europea del Voluntariado 2014.

El Encuentro, dirigido por la Hna. Miriam Zapeta, tiene un carácter principalmente formativo, su objetivo es profundizar en los valores del voluntario y orientar a los participantes a que hagan un trabajo personal y sincero sobre sus motivos para realizar esta misión.

La Parábola del Buen Samaritano fue el centro e hilo conductor del encuentro, a través de ella se explicó la actitud que debe tener todo voluntario, que es conocer y ver la situación de quienes encontramos en el camino, sentir compasión por los que sufren y acercarnos a ellos compartiendo los talentos que cada uno disponga.

Esta formación es muy enriquecedora ya que anima a replantearnos nuestra forma de vida, a reorientar nuestro espíritu, a implicarnos en el mundo en que vivimos. No es necesario ir a otros países para acercarnos a la gente que nos necesita, con simples gestos cotidianos, compromiso en sensibilizar a otras personas, saber escuchar a los que no tienen quien los escuche, transmitir humanidad, esperanza, respeto, ser una luz que encienda otra luz en cualquier sitio donde estemos.

Después de la comida, el Encuentro fue más informativo. La Hna. Miriam expuso el carisma de las Dominicas de la Anunciata y sus misiones.  Los interesados en hacer su experiencia misioneras explicaron su perfil, intereses y disponibilidad para colaborar con las misiones. Gela Testas

 

El día 15 de marzo asistí en Madrid, a la primera reunión de voluntariado misionero de las Dominicas de la Anunciata.

Esperaba encontrarme con un grupo más numeroso, pero aún siendo poquitos, para mí, fue una breve pero bonita jornada; entre otras cosas, por mi reencuentro con una Institución de la que he formado parte activa en mis años de juventud vividos en Madrid y Sagunto, así como durante mi niñez y adolescencia como alumna del Colegio Ntra. Sra. del Rosario de Campo de Criptana.

Me gustó reencontrarme con Hermanas que hacía más de treinta años  que no veía y observar cómo el paso del tiempo nos va cambiando en muchos aspectos, el más aparente el físico.

Conocí a Miriam, quien nos recibió y acogió con cariño. Había preparado una serie de videos cortos que invitaban a la reflexión y análisis de las distintas realidades sociales  de injusticia y desigualdades en un mundo global. Cada uno de los asistentes, fuimos aportando nuestro granito de arena en un diálogo sereno y participativo de experiencia personal. 

Como invitación a participar en la misión, leímos y  analizamos la parábola del “Buen  samaritano”. Creo que estaba muy bien elegida. Pienso que dicha parábola no deja indiferente a cualquier persona que intenta o quiere imitar a Jesús. Siempre me han gustado las parábolas porque en ellas aparece la infinita misericordia de Dios con todos los seres humanos.

“Necesitados” , cuando queremos “ver” los encontramos permanentemente cada día y mucho más en estos momentos en que estamos viviendo y viendo a nuestro alrededor, tanta problemática social y familiar por las desigualdades y crisis que padecemos.

Por ello se hace necesario dar respuestas de compasión, generosidad y compromiso como hace el samaritano.

¡Solo le pido a Dios que lo injusto no me sea indiferente!

Me alegro mucho que la Anunciata abra las puertas a  un  voluntariado joven y con ganas de hacer realidad la parábola.   Soledad Flores

 

La Real Academia de la Lengua Española define la voluntad como aquello que se hace por deseo propio, por capricho,… sin obligación ni imposición alguna, sin tener obligación de hacerlo.

Por ende, nosotros, los voluntarios, realizamos o intentamos realizar nuestra labor solidaria sin que nada ni nadie nos obligue a ello. Sentimos la necesidad de realizarlo.

¿Todos podemos hacer el voluntariado? ¿Todos podemos querer ser voluntarios?

¿Dónde está la diferencia? Esa diferencia, a veces tan sutil, la tenemos que encontrar o descubrir nosotros mismos tras las reuniones de formación, donde no sólo se expone quién soy y qué puedo hacer, sino que se espera de cada uno de los candidatos. Esta reunión la llevamos a cabo el pasado 15 de Marzo en Madrid.

El reconocimiento y sobre todo aceptación de nuestras actitudes y aptitudes; el ser consciente de por qué quiero hacer el voluntariado, nuestras motivaciones personales; el aceptar los destinos ofrecidos; el ser capaz de deshacer los planes previstos y adecuarse a la situación social, cultural,… del destino con una amplia sonrisa y con el corazón y los brazos bien abiertos, es el primer paso para ser candidato a colaborar en las misiones Anunciata.  Lo que implica un respeto, la aceptación de sus costumbres, formas de vida, estilos de trabajo,… puesto que vamos a ser admitidos en su comunidad y convivir con ellas….. Julio Cueto

“Siento la necesidad de devolver a la sociedad una parte de lo que he recibido y Ia mejor manera que he encontrado es la del voluntariado”. Testimonio de un voluntario

Para ver las fotografías de los encuentros, pinchar aquí