NOTICIAS

Detrás de la SAGRADA FAMILIA …

29 de Diciembre 2019

Este domingo dentro de la Octava de Navidad, rendamos homenaje a la Sagrada Familia de Jesús, María y José. Al honrar a su Sagrada Familia, también honramos a la familia de Dios, la Iglesia. Celebrando la solemnidad de la sagrada familia, tratemos de entrar en lo que está oculto, la vida cotidiana de la Sagrada Familia de Nazaret.

Al igual que cualquier otro hogar, el hogar de Jesús, María y José habrían hablado, trabajado, jugado y se había divertido; lidió con problemas e incluso encontró la muerte de sus seres queridos. San José probablemente falleció cuando Jesús comenzó su misión públicamente. Habrían cumplido todas las tareas diarias, ganarse la vida, poner comida en la mesa e incluso socializar con amigos y familiares

Si son como cualquier otra familia, ¿qué es realmente tan especial que hace de su familia una familia sagrada? Si analizamos el contexto sociohistórico de la Palestina del primer siglo, descubrimos que José y María son padres apenas capaces y preparados para Jesús. José era un pobre carpintero de Nazaret. Tuvo que trabajar para mantener a María y a Jesús. Lo mismo con María. A pesar de su incapacidad para comprender la concepción virginal de Jesús, es consciente de que tener un hijo fuera del matrimonio significa vergüenza e incluso la muerte. También era una mujer muy joven y apenas estaba preparada para el embarazo. Podemos decir que Dios definitivamente tomó una decisión muy arriesgada para confiar a su único Hijo a esta pareja.

Por lo tanto, José y María no tienen una vida conveniente incluso con Jesús en medio de ellos. Sin embargo, tanto María como José están de acuerdo con el proyecto de Dios, y dejan que la gracia de Dios llene sus vidas, y esto los hace santos. La santidad de la Sagrada Familia revela que cada familia está invitada a compartir la vida divina de Dios y a encontrar la vida cotidiana ordinaria con gracia y virtud.

Sin embargo, el objetivo de la Sagrada Familia no es tanto la bondad de los miembros individuales. No se trata de la grandeza de María, quien es bendita entre las mujeres. No se trata de la justicia de José que sigue fielmente la ley de Moisés. Sin embargo, se trata de la gracia y la misericordia de Dios, y cómo se abren a estos dones de Dios.

Al mirar a nuestras propias familias, nos damos cuenta de que no somos nada comparables con esta Sagrada Familia. Estamos llamados a ser santos como ellos, pero seguimos luchando y fracasando. Con sus ejemplos, nos damos cuenta de que construir una familia santa es una vocación difícil. Al igual que José y María, nos enfrentaremos a problemas difíciles, desde la inestabilidad financiera hasta los desacuerdos personales, y confiando en nuestra propia fuerza, seguramente caeremos. Sin embargo, como María y José, nos abrimos a la gracia de Dios, porque cuando Dios nos llama a la santidad en la familia, seguramente nos llevará a todos a la perfección.

Por lo tanto, no demos por sentado el verdadero significado de la familia. Volvamos a nuestra familia. Tomar nota es más importante que las relaciones y Dios nos dio una familia para empezar. Que nunca lleguemos demasiado tarde para darnos cuenta de que nuestra familia es todo lo que tenemos. ¡Dios nos regaló a todos una familia!

Por lo tanto, detrás de la sagrada familia, ¡está nuestra familia en verdad! ¿Por qué? Porque siempre estamos mirando a María y José como nuestras guías y modelos que nos permiten conocer la verdadera esencia de la maternidad y la paternidad. Somos quienes somos por la Sagrada Familia.

Hna. Regina (Filipinas)

Ver y/o descargar el comentario de la Palabra del día de la Sagrada Familia en INGLÉS