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Decimosegundo aniversario de la Canonización de San Francisco Coll

¡Dios ha estado grande con nosotras, por eso estamos alegres! Con estas y otras palabras nos animaba nuestra querida Hermana Mª Natividad Martínez de Castro a celebrar con alegría la Canonización de nuestro Fundador, San Francisco Coll. De este gran acontecimiento han pasado ya doce años: ocurrió el 11 de octubre de 2009. Hoy, nuestra querida “Hermana Nati” ya está en el Cielo, y seguro que desde allí sigue velando con amor por su Congregación y por todos los amigos y amigas de San Francisco Coll. Nos hará bien recordar y reflexionar una vez más sus palabras gozosas, vibrantes, desafiantes, como las que pronunció aquel mismo día en la Acción de Gracias en Roma:

«Mis queridas hermanas:

Viendo vuestros rostros me vienen las palabras que escribió el Padre Coll en su Proyecto de Constituciones: “si sois verdaderas hijas de María y Esposas de su Hijo, este Santo Instituto no cesará hasta ser extendido y dilatado por toda la tierra.” No te equivocaste, Padre Coll. Aquí (y allí en las comunidades) estamos hermanas africanas, latinoamericanas, asiáticas y europeas. Veinte países de los cuatro puntos cardinales donde la Anunciata ha plantado su tienda. Un pronóstico hecho realidad y un desafío para nosotras, pues son 193 los estados del mundo.

Esta mañana hemos vivido un emocionante e intenso momento eclesial en la Plaza de San Pedro. Ahora nos hemos reunido en nuestra pequeña familia para saborear juntas la dicha de ver a nuestro Fundador reconocido universalmente por su vida evangélica, por su fidelidad a la vocación, por su infatigable celo apostólico y por la audacia de su Obra, la Anunciata.

¡Dichosos nuestros ojos, porque han visto, y nuestros oídos, porque han oído lo que tantas generaciones de Hermanas desearon oír y ver y no lo vieron ni lo oyeron! El Señor nos lo reservó a nosotras y estamos profundamente agradecidas y gozosas.

Hoy nos sentimos orgullosas de este fiel hijo de Domingo y de María, San Francisco Coll, nuestro Fundador. ¿Se sentirá él orgulloso de nosotras y tan esperanzado como lo estaba de las primeras Hermanas?

No cabe duda que es un momento muy oportuno y una gracia de Dios que la Canonización del Padre Coll haya tenido lugar precisamente en esta situación… llena de desafíos para la Congregación y de grandes problemas y dificultades mundiales. Forjado él en la dificultad y multitud de contratiempos, que supo superar con la ayuda de Dios y de María, viene hoy a fortalecer nuestra debilidad y esperanza. Con el Salmo 27 nos dice: sed valientes, tened ánimo, confiad en el Señor.

Su Canonización nos interpela, nos urge, nos estimula, nos compromete a seguir en el camino que él nos trazó con mayor radicalidad, pasión y entrega: a engrandecer la Congregación no tanto por el número y la excelencia sino por la fidelidad a Jesucristo y el amor efectivo a los pequeños y descuidados por la sociedad; a continuar en el camino de santidad que un día emprendimos con gran coraje, entusiasmo e ilusión hasta, como él, llegar “al cel, al cel, al cel”. Que San Francisco Coll nos acompañe, inspire y proteja siempre…»

Hna. Natividad Martínez

 (En la Comunidad de Roma, Villa Anunziata, el mismo 11 de octubre de 2009)

Sí, que San Francisco Coll, y también el testimonio, el recuerdo y la intercesión de la Hna. Nati nos sigan iluminando, acompañando y fortaleciendo en este camino de fidelidad y entrega que nos han trazado…