NOTICIAS

El día 2 de mayo, dentro del Encuentro de Consejos de la Congregación, celebrado en nuestra Casa Madre de Vic, y los días 4 y 5 de mayo, una vez terminado el Encuentro, nos reunimos las Hermanas Delegadas de PJV de las Provincias, Vicariato y Delegada general:

– San Raimundo:        H. Eulalia Vivet

– Santo Domingo:       H. Elena González

– Santa Catalina:        H. Generosa Somoano

– Santa Rosa:             H. Patricia Contreras

– San Martín:              H. Amanda Molina

– Vicariato:                  H. Josiane N’go Babang

– Delegada general:    H. Ana Penadé

La H. Ana Penadés, nos invitó a recorrer estos días intercambiando la vida y el caminar de la delegación en cada lugar, sobre todo animándonos a seguir apostando por hacer de esta delegación una propuesta provocativa y audaz. Los dos últimos días estuvieron ausentes dos hermanas delegadas.

Comenzamos exponiendo lo que estamos haciendo en el campo de la PJV en las provincias y vicariato: sin duda, tenemos una riqueza inmensa, diversa, plural; en cada lugar se están realizando hermosas actividades para adolescentes y jóvenes y también particularmente en el campo de la pastoral vocacional específica. Compartimos nuestros pequeños logros, también las dificultades que tenemos a la hora de proponernos una PJV en salida, atractiva, armónica, en equipo, que involucre a todas las hermanas.

Muchos son los desafíos que tenemos, sin embargo, constatamos el compromiso con esta tarea, queremos buscar la manera de hacer propuestas que respondan a las búsquedas de nuestros/as jóvenes, queremos fortalecer la propia vocación, nuestra alegre fidelidad, porque es desde allí que despertará en otras jóvenes la llamada. Queremos seguir apostando por proponer espacios allí donde hay respuesta y seguir sembrando allí donde parece no haberla.

El día 4 de mayo nos acompañó en la reflexión Enric Puiggrós, jesuita, promotor vocacional de la Provincia de España. Nos habló sobre el recorrido y las opciones que vienen haciendo los jesuitas en el campo de la pastoral vocacional. Generosamente nos compartió sus estrategias, sus actividades, recursos e intentos en el campo de la Pastoral Juvenil y en la Pastoral Vocacional específica; nos contó de su opción de visibilizar la vocación propia: jesuita, dominica…, cómo comunicar y hacer comunicable el mensaje hacia dentro de nuestras comunidades y hacia fuera (el uso de las redes sociales, y las distintas estrategias de comunicación visual) también nos enseñó la unidad que dan a los lemas para todas las escuelas con líneas fuerza sostenidas en la espiritualidad; las estrategias de los encuentros de discernimiento. Nos habló de sus convicciones, de su presencia como promotor vocacional en los distintos equipos de PJV, e insistió en que es solo desde el acompañamiento personal que los procesos pueden ser acelerados y decisivos. Nos habló también de la opción que han hecho: buscar en las distintas plataformas: escuelas, universidades, social, instituciones… a los promotores cualificados y adecuados que serán lo que animarán en estos espacios y la opción de que se ubiquen en los lugares estratégicos. Nos preguntaba: ¿Dónde debemos estar? ¿Para qué estamos? Insistió en que debemos escoger espacios, tiempos, lugares, que para él eso es verdaderamente “Priorizar”. Nos señaló que, aunque no sea grande el número de candidatos que ingresen, lo importante es que haya gente en el proceso de discernimiento y que se plantee con seriedad su vocación. Hablamos de cuatro retos de futuro:

1.- Seguir potenciando la PASTORAL VOCACIONAL, no creernos que está todo hecho; hacer y rehacer planes, proyectos, búsquedas, estrategias; es una tarea de estar siempre en camino. Implicar a todos: si todas quieren vocaciones ¿Qué hacen?

2.- ACOMPAÑAMIENTO PERSONAL, que implica tiempo y dedicación.

3.- LENGUAJE ADECUADO, hacer visible la vocación, utilizar buenos recursos: la imagen, lemas, publicidad.

4.- BUSCAR SINERGIAS, enganchar y promover procesos y experiencias, que partan de la pastoral juvenil hacia la pastoral vocacional, pero teniendo en cuenta “el examen”, es decir, invitar a los jóvenes a seguir trabajando personalmente las experiencias, que lo que va descubriendo se integre en la vida, que no quede en el aire.

Este tiempo estuvo con nosotras la H. Rosa Mª Picas, hasta ahora delegada provincial de PJV.

Hicimos eco de todo lo compartido y fue muy interesante ver que la materia prima que tenemos es abundante, tenemos buen material, buenos documentos, tenemos mucho camino recorrido y adelantado; el desafío está en organizarlo de otra manera, en darle forma, en continuar procesos, en enganchar y trabajar juntas en las diversas plataformas de apostolado que tenemos, quizás nos falta asumir en este ámbito de la PJV,  el camino de andar y desandar, de volver a empezar siempre y en hacer que los procesos y las experiencias continúen calando en la vida de los jóvenes.

El último día revisamos los números de las actas del capítulo general referidos a la PJV y nos dedicamos a concretar en algunos aspectos. Nos preguntamos ¿qué debemos seguir fomentando? De aquí salieron varias propuestas: compartir experiencias, crear una batería de materiales, que tenemos mucho y muy buenos, seguir potenciando la comunicación: visibilizarnos. Decidimos crear un Twitter que se puede seguir: @anunciataop; retomar y mantener nuestros Facebook de PJV provinciales; hacer breves videos vocacionales, tarjetas, y todo lo que nos ayude a mostrar y hacer comunicable nuestra vida. Sin duda que el anuncio de este próximo Sínodo en 2018 sobre el discernimiento vocacional en los jóvenes, y el trabajo propuesto para el estudio y la reflexión, nos darán nuevas pistas, y nos animarán a seguir acompañando de manera personal a nuestros jóvenes.

No queda más que agradecer…gracias por el lugar elegido, porque nuestra Casa Madre siempre nos conecta con las raíces, las opciones esenciales, las búsquedas profundas y fieles del “SI para siempre”. Muchas gracias H. Ana por la convocatoria que siempre nos hace bien, nos renueva en la misión y nos anima a seguir sembrando. Agradecer también a las hermanas delegadas de la PJV en cada rincón donde estamos presentes, por el entusiasmo, la alegría, por contagiarnos unas a otras, por compartir la vida, las búsquedas, los intentos y sobre todo porque a pesar de las dificultades y contrariedades, queremos seguir siendo anuncio para este mundo y el mundo de los jóvenes.

Hna. Patricia A. Contreras