NOTICIAS

COMENTARIO DEL EVANGELIO IV DOMINGO DE PASCUA 2021

20 abril, 2021

Domingo del Buen Pastor «Jornada de oración por las vocaciones»

«Escucharán mi voz: habrá un solo rebaño y un solo Pastor». (Juan, 10, 16)

Al escuchar las palabras de este domingo debemos recordar que Dios nos llamó a todos. A través del bautismo somos sacerdotes, profetas y rey. Por el bautismo somos llamados y al mismo tiempo enviados. El Resucitado nos envía a seguirlo, a vigilar por sus ovejas, inquietas o dóciles, abatidas o radiantes. En este día en que rezamos por quienes se sienten llamados a un don radical de sí mismos, cultivemos la llamada universal para caminar con el Buen Pastor.

En un Capítulo de los Hechos de los Apóstoles vemos al Apóstol Pedro experimentando el poder de Jesús Resucitado, donde nos dice que «bajo el cielo no se da a los hombres ningún otro Nombre que pueda salvarnos». Jesús Resucitado es el Buen Pastor. Después de la curación de un cojo en el templo de Jerusalén, cerca de la Puerta Hermosa, inmediatamente después de este milagro, Pedro improvisó un discurso en el que dijo a los judíos que lo escuchaban: Este es Jesús, el que  crucificasteis y a quien Dios  ha resucitado. Es quien acaba de realizar este milagro ante vuestros ojos, a través de nosotros, sus apóstoles. Pedro testifica con seguridad que es por el Nombre de Jesús el Nazareno «y ningún otro que él» que las ovejas son conducidas a los prados de la vida.

Jesús se presenta a todo el pueblo de Israel como «el bueno», «el verdadero», como el que nadie más que él cuida tanto de sus ovejas. Jesús dio su vida por ellas. No desertó en el momento de su pasión, porque «el verdadero pastor da su vida por sus ovejas», dice Jesús, a diferencia del pastor, que en realidad no es más que un mercenario al servicio de sí mismo. El buen pastor, el verdadero pastor significa el que conoce a sus ovejas una a una. No es el jefe de un rebaño que no sabe si son más o menos numerosas, que son anónimas para él, al contrario, conoce a cada una de ellas por su propio nombre.

Si estamos atentos a esta disposición del corazón de Jesús por sus ovejas, incluso podemos detectar un verdadero motivo de orgullo por su parte. Jesús no duda en tener un especial cuidado por cada una de sus ovejas. Queridos jóvenes en formación, o jóvenes que dudáis que el Señor os haya llamado, pensad que es normal hacernos la pregunta porque es una luz que nos ayuda a discernir nuestra vocación: el cuestionamiento, el asombro y la conmoción. Pero debéis saber que, desde vuestro bautismo, Cristo os llamó a seguirlo y que cada uno experimenta el amor con que Jesús le ama y que merece ofrecerle toda la vida. Jesús nunca dejó de mostrarnos el amor que tiene por cada uno de nosotros y cuánto valemos cada uno a sus ojos. Como dice Dios: «Porque eres valioso a mis ojos, porque eres honrado y porque te amo, no temas, porque yo estoy contigo». (Isaías, 43,4)

Este domingo, contemplando el amor que Jesús nos ama, me complace compartiros tres características que caracterizan al Buen Pastor para poder distinguirlo de los mercenarios.

SEGUIR LEYENDO EL COMENTARIO AQUI

Hna Claudine UWAJEZNA